Los cuencos tibetanos son objetos rituales budistas empleados como instrumentos musicales, y que se caracterizan tanto por su potente sonido, como por su profunda y penetrante vibración.

Sus orígenes se remontan a la zona del Tíbet, cuando imperaba la tradición chamánica Bön antes de la llegada del budismo, y fue más tarde que esta religión los adoptó como instrumentos rituales. En sus inicios tenían múltiples usos, y además de sus funciones sonoras, servían como recipiente y plato para la comida y las ofrendas. Actualmente se utilizan en templos y monasterios budistas de todo el mundo para meditar y como instrumento musical para las ceremonias y ritos.

Desde hace siglos, son usados para facilitar la concentración y relajación de la mente y el cuerpo a través de su sonido, ayudando a la consecución de estados meditativos. También son muy conocidas sus funciones terapéuticas y/o sanadoras, puesto que sus vibraciones armonizadas son muy beneficiosas para la salud debido a que generan estados de calma, armonía y bienestar.
Gracias a sus cualidades y virtudes, en la actualidad su uso ha sido adoptado por practicantes de yoga, meditación, mindulness, y profesionales otras disciplinas que requieren un estado de relajación.
Las capacidades sonoras y vibracionales de cada cuenco tibetano varían en función de la aleación de los metales (especialmente de la proporción de bronce), del tamaño, del grosor, de la forma y de la apertura y caja de resonancia.
Existen diferentes tipos de cuencos tibetanos, en función de los materiales empleados y del proceso de elaboración. Originalmente estaban hechos con una aleación de 7 metales (e incluso 12), de acuerdo con el número de planetas que entonces se conocían, y siempre estaban hechos a mano. Los metales empleados eran oro, plata, mercurio, plomo, hierro y bronce (cobre y estaño).
En la actualidad podemos encontrar cuencos tibetanos con diferentes aleaciones de metal, y pueden estar hechos con la ayuda de un torno, o bien a mano siguiendo la forma tradicional, es decir con un molde para dar la forma básica y después picados con martillo hasta conseguir el sonido deseado.
Hoy en día, en la composición de la mayoría de los cuencos tibetanos artesanales picados a mano, predomina el llamado “bronce de campana”, un tipo de bronce especial que contiene un porcentaje más elevado de estaño que el bronce normal en su composición, y que produce un sonido más profundo, más limpio y más agradable. El resto de metales están en proporciones testimoniales.
En la composición de la mayoría de los cuencos tibetanos torneados predomina el bronce y el latón, que es una mezcla de cobre y zinc, y aún teniendo un buen rendimiento sonoro y vibracional, producen un sonido algo más “enlatado” y corto, y una vibración no tan prolongada como los artesanales.


En Himalayan Paradise trabajamos con 3 tipos de cuencos tibetanos, todos hechos en Nepal, e importados de manera directa y personal: cuencos tibetanos hechos con torno (torneados)cuencos tibetanos de 7 metales artesanales (hechos a mano) y cuencos tibetanos de 7 metales de alta calidad artesanales (hechos a mano). Además, disponemos de diferentes complementos para cuencos tibetanos (baquetas, cojines y soportes, fundas,...)
Todos nuestros cuencos tibetanos han sido seleccionados personalmente por su calidad sonora y vibracional en los diferentes talleres de Nepal por nuestro equipo con 10 años de experiencia.

LOS CUENCOS TIBETANOS TORNEADOS 

Los cuencos tibetanos hechos con torno se caracterizan por la predominancia del sonido sobre la vibración, y su facilidad de uso.
Indicados para todo tipo de trabajo con el sonido y/o terapia sonora (relajaciones, meditaciones, sesiones de yoga, etc.), son ideales para la iniciación en la práctica con cuencos tibetanos, puesto que su contorno liso hace muy fácil deslizar la baqueta por encima. Su sonido claro y potente se vuelve más grave a medida que aumenta el tamaño del cuenco.
Están hechos de una aleación de metales donde prevalece el latón y el bronce, y están modelados y pulidos con la ayuda de un torno mecánico que les otorga su forma tan simétrica y su sonido tan característico.
En Himalayan Paradise tenemos diferentes tipos de cuencos torneados que se diferencian por su medida y su acabado.
- Cuencos tibetanos torneados lisos.
- Cuencos tibetanos torneados dorados.
- Cuencos tibetanos torneados golpeados con acabado artesano.
- Cuencos tibetanos torneados decorados con motivos budistas.

Cuencos tibetanos torneados | Himalayan Paradise

LOS CUENCOS TIBETANOS DE 7 METALES ARTESANALES

Los cuencos tibetanos de 7 metales hechos a mano se caracterizan por el equilibrio entre sonido y vibración.
Su potente sonido, rico en armónicos, y su profunda y larga vibración, hace que sean ideales para la iniciación en la práctica de la terapia sonora y vibracional con cuencos tibetanos.
Están hechos de una aleación de 7 metales: oro, plata, mercurio, plomo, hierro y bronce (cobre y estaño), en la cual predomina el llamado “bronce de campana”, un tipo de bronce especial que contiene un porcentaje más elevado de estaño que el bronce normal en su composición, y que produce un sonido más profundo, más limpio y más agradable. El resto de metales están en proporciones testimoniales. Una vez la aleación de metales está en el molde, son desenmoldados y trabajados por los artesanos, que los van picando con martillo, hasta que consiguen la forma y el sonido deseado.
En Himalayan Paradise ofrecemos los cuencos tibetanos de 7 metales artesanales según rangos de peso, desde los 150 gramos hasta los más de 2 kg, y según su diseño, liso natural o grabado con motivos budistas.

Cuencos tibetanos artesanales | Himalayan Paradise

LOS CUENCOS TIBETANOS DE 7 METALES ARTESANALES DE ALTA CALIDAD

Los cuencos tibetanos de 7 metales hechos a mano de alta calidad se caracterizan por una gran predominancia de la vibración sobre el sonido. Emite un sonido grave, potente y rico en armónicos, y una vibración que destaca por su potencia, profundidad y duración.
Están indicados para todo tipo de trabajo con el sonido (relajaciones, meditaciones, sesiones de yoga, etc.) y especialmente con la vibración, y recomendados para un trabajo de cariz profesional con cuencos tibetanos. Una garantía de este hecho es que son los utilizados por Peter Hess, gurú occidental de la terapia vibracional con cuencos tibetanos.
Provienen de la ciudad de Bhaktapur, y están realizados por una cooperativa gestionada bajo los principios del comercio justo. Están hechos con una aleación de 7 metales: oro, plata, mercurio, plomo, hierro y bronce (cobre y estaño), en el cual predomina el llamado “bronce de campana”, un tipo de bronce especial que contiene un porcentaje más elevado de estaño que el bronce normal en su composición, y que produce un sonido más profundo, más limpio y más agradable. El resto de metales están en proporciones testimoniales. Además, en esta aleación se introduce un trozo de cuenco tibetano antiguo, puesto que el artesano que los hace cree que la sabiduría del cuenco antiguo se transmite al nuevo. Una vez la aleación de metales está en el molde, son desenmoldados  y trabajados por los artesanos, que los van picando con martillo, hasta que consiguen la forma y el sonido deseado. En este caso, el número de horas dedicadas a la realización de un cuenco tibetano es aproximadamente el doble que las dedicadas en los cuencos normales de 7 metales.
En Himalayan Paradise tenemos diferentes modelos de cuencos tibetanos de 7 metales artesanales de alta calidad en función de su tamaño y peso.

Cuencos tibetanos artesanales alta calidad  | Himalayan Paradise

COMPLEMENTOS CUENCOS TIBETANOS

Existen diferentes accesorios que completarán tu experiencia con los cuencos tibetanos.

Las baquetas o “palos” de madera son los elementos con los que golpeamos o friccionamos los cuencos. Existen de diferentes tamaños y de diferentes diseños y tipos de madera.

La baqueta lisa de madera facilita el hacer sonar el cuenco tibetano, pero por contra el sonido que se obtiene no es tan “limpio” como con las forradas, ya que friccionan directamente la madera y el metal. Además, la vibración obtenida es menor. Indicada para la fase de iniciación y para cuencos tibetanos pequeños.

Con la baqueta forrada se consigue un sonido más claro y más grave, y se consigue extraer toda la vibración del cuenco. Pero por contra, resulta ser algo más difícil de aplicar, sobre todo en los cuencos de tamaño pequeño.

La baqueta de golpeo es ideal para cuencos grandes, aquellos con una mayor caja de resonancia; y también para los gongs.

 

Los cojines son los soportes sobre los que reposa el cuenco tibetano. Sus razones son tanto rituales (el cuenco tibetano es un objeto sagrado y es recomendable elevarlo del resto de objetos con los que comparte superficie), como prácticos (se puede hacer sonar sobre el cojín para no tener que sostenerlo en la mano toda la sesión).

Existen diferentes tipos de cojines y hay para todos los tamaños.

Los cojines en forma de “donut” son los más conocidos y usados. Son sencillos, prácticos y cumplen su función.

Los cojines cuadrados resultan más vistosos y hacen resaltar al cuenco, pero no son tan estables como los anteriores.

 

Las fundas y bolsas de transporte resultan muy útiles cuando queremos movernos con nuestros cuencos, y además ofrecen un plus de protección porque tienen la base acolchada.

Los libros te servirán para ampliar tus conocimientos sobre los cuencos tibetanos y sus utilidades, mediante la lectura de reputados autores en el campo del sonido, la vibración y las frecuencias.

Y con los CD's de música disfrutarás de sesiones grabadas con cuencos tibetanos, en ocasiones también acompañando a otros instrumentos, que te servirán para relajarte o meditar.

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